La familia real británica tiene acceso a los mejores chefs del mundo. Al fin y al cabo, viven una vida de lujo y privilegios.
Sin embargo, te sorprenderá saber que la realeza no se alimenta de solo caviar, ni mucho menos.
¿Quieres conocer las preferencias gastronómicas del rey Carlos y la reina Camila? Te revelamos también la comida favorita de la infancia de los príncipes Guillermo y Enrique, así como los hábitos culinarios que tiene la princesa Catalina en casa.
Además, te descubriremos las lujosas comidas que se servían a los queridos corgis de la difunta reina Isabel II. Interesante, ¿verdad?
Sigue leyendo para descubrir los sorprendentes hábitos alimentarios de la familia real británica.
Adaptado al español por Alba Mora Antoja, Redactora en Español para loveFOOD.
Según Darren McGrady, el que fuera chef de la reina Isabel durante 15 años, la difunta monarca era una gran fanática del chocolate negro.
De hecho, le gustaban especialmente los bombones de menta negra y las trufas de chocolate, sobre todo los que tenían notas aromáticas y florales.
McGrady también reveló a la revista Marie Claire que la reina tenía debilidad por su tarta de galletas de chocolate, que estaba siempre presente en el menú del té de la tarde real.
El té de la tarde es una institución culinaria muy querida para la realeza británica. La difunta reina se sentaba a disfrutar de la tradición casi todos los días.
Según Darren McGrady y el periódico The Daily Telegraph, el aperitivo consistía en delicados sándwiches sin corteza, pequeños pasteles y bollos.
Los bollos se elaboraban según una receta clásica con suero de mantequilla y abundantes pasas sultanas.
El chef McGrady también reveló que la reina solía desmenuzarlos para compartirlos con sus corgis (evitando los frutos secos, que son venenosos para los perros).
El chef McGrady (en la foto) también reveló al portal HelloMagazine.com que el filete gaélico era una de las comidas favoritas de la difunta reina.
Su receta, que la reina adoraba, consiste en un filete de ternera o de venado acompañado de una salsa de crema de champiñones.
El ingrediente mágico es, al parecer, un poquito de Marmite, una popular pasta para untar en el Reino Unido elaborada con extracto de levadura.
Los palacios reales se toman muy en serio la planificación de la comida y los menús.
El chef Darren McGrady reveló a la revista Marie Claire cómo creaba los menús para la difunta reina: “En el Palacio de Buckingham, hacíamos un libro de menús que enviábamos a la reina y ella podía elegir los platos que quería. El libro volvía a la cocina y nosotros los preparábamos”.
Estos menús se seleccionaban con tres o más días de antelación y rara vez se cambiaban.
La reina era una gran fan de los mangos.
El que fuera chef del Palacio de Buckingham, John Higgins, declaró al periódico Canadian National Post: “Podría decirte cuántos mangos había en la nevera del Palacio de Buckingham”.
Según los informes, a su madre, la Reina Madre, también le encantaba esta fruta tropical.
Durante su primera Navidad en Sandringham en 2011, Kate Middleton (entonces duquesa de Cambridge) estaba inquieta por qué regalarle a la reina.
Al final, optó por un regalo casero muy considerado: un tarro de chutney de calabacín. Kate dijo en un documental de la cadena británica ITV: “Pensé: 'Le haré algo', lo que podría haber salido horriblemente mal. Pero decidí hacer la receta de chutney de mi abuela”.
A la reina le encantó verlo en la mesa del comedor al día siguiente.
Mucho antes de que la comida orgánica y la agricultura sostenible estuvieran de moda, el rey Carlos era un defensor de estas prácticas.
El monarca lleva siguiendo una dieta mayoritariamente orgánica durante más de 40 años. En 1990, lanzó su propia gama orgánica, Duchy Originals, y ha hablado extensamente sobre la importancia de mantener la biodiversidad en la naturaleza.
Según la prensa, ahora come pescado y carne solo dos veces a la semana y sigue una dieta totalmente vegetal al menos un día de cada siete.
En su libro On Royalty, Jeremy Paxman afirmó que el rey Carlos es tan exigente con sus huevos cocidos que su personal preparaba hasta siete, con la esperanza de que uno fuera el adecuado.
Aunque esta idea fue refutada en el sitio web oficial del rey, el que fuera su chef Mervyn Wycherley hizo una afirmación similar, diciendo: “Le gustaban los huevos hervidos durante 4 minutos. Nos comunicaban su hora estimada de llegada. Siempre tenía tres cacerolas hirviendo, por si acaso.”
Al rey Carlos, le encanta una buena taza de té. Su variedad preferida es el té darjeeling, un té negro de la India.
Según el periódico británico The Sunday Times, le gusta que su infusión se haga con hojas de té sueltas en una tetera, con una proporción de una cucharadita de hojas por taza de té, más una de agua.
A la hora de servirlo, es esencial un chorrito de leche y una pizca de miel.
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Al parecer, el rey lleva consigo bolsas isotérmicas de platos caseros cuando viaja. “Le gustaba llevar su propia comida”, declaró la ex chef real Carolyn Robb al periódico Daily Mail.
Otro chef real, Graham Newbold, añadió que el rey viaja con una cesta de desayuno incluso cuando se aloja en una residencia real. Dijo: “Lleva pan casero, un bol de fruta fresca, zumos de fruta fresca. Tiene seis tipos diferentes de miel, algunos mueslis especiales, sus frutos secos y cualquier cosa que sea un poco especial y que le guste”.
El rey fue editor invitado de la revista Country Life con motivo de su 70 cumpleaños. En ella, reveló que la tarta de crumble de faisán era su plato favorito. El chef ejecutivo del Hotel Ritz de Londres, John Williams, compartió la receta.
El rey Carlos añadió que también le gusta utilizar carne de caza en otras recetas. “Recientemente inventé una con urogallo, Coq au Vin con urogallo, así como Moussaka con urogallo (no siempre tiene que ser cordero)”, escribió.
En 2013, Camila, entonces duquesa de Cornualles, reveló su inusual gusto por los guisantes crudos.
“Os diré lo que realmente me gusta: comer guisantes directamente del huerto”, dijo a los estudiantes durante una visita a una escuela en Slough, en el condado inglés de Berkshire.
“Si los cogéis directamente de la vaina, están deliciosos y muy dulces. Llevo a todos mis nietos al huerto y se pasan horas y horas comiendo guisantes”, añadió.
En una entrevista con su hijo, el escritor gastronómico Tom Parker-Bowles, Camilla reveló que le encanta el fish and chips (“pescado y patatas fritas”), el plato estrella de la nación británica.
A la reina Camilla, le encanta darse un capricho y comer “un fish and chips recién hecho, envueltos en papel”. Además, aañadió: “Ese olor. No hay nada mejor que un buen fish and chips”.
Cuando les apetece una comida reconfortante, la realeza (como millones de británicos) opta por algo sencillo y muy británico: tostadas con judías. La reina Camila aseguró a la revista You Magazine que es una de sus comidas favoritas y que las judías son “siempre de Heinz”.
Mel B, una de las Spice Girls, también reveló al medio Entertainment Today que, cuando el grupo solía visitar a los jóvenes príncipes Guillermo y Enrique, todos se zampaban este sencillo plato tan típico de la gastronomía británica.
El rey Carlos y la reina consorte Camila eligieron personalmente la quiche como plato principal para las celebraciones y eventos de su coronación el 6 de mayo de 2023.
La quiche consistía en una masa crujiente y ligera rellena de una rica crema pastelera al horno aromatizada con espinacas frescas, habas, queso cheddar y estragón.
La receta todavía se puede leer en el sitio web oficial de la realeza.
La reina Camila reveló que ella y el rey Carlos disfrutan cultivando sus propios productos, como brócoli, zanahorias y calabacines.
“Me encanta el huerto, en verano en particular. Estoy muy orgullosa de mis melocotones blancos. Mi marido es un excelente jardinero, y somos bastante competitivos con nuestras frutas y verduras,” dijo.
El rey tiene su propia “cocina de jardín” desde 1985, y describe la jardinería como “el negocio más terapéutico”.
En 2018, el príncipe Guillermo reveló que le gusta la cadena de pollos de comida rápida Nando's, muy popular en el Reino Unido. Dijo que uno de sus agentes de protección policial fue quien le introdujo a la comida de este restaurante.
Al conocer al cofundador de la cadena, le dijo: “Está muy bueno”.
A Guillermo y Enrique también les encantaba ir a McDonald's cuando eran niños.
En julio de 2023, el príncipe Guillermo se asoció con la comunidad de cocina online Sorted Food para servir hamburguesas desde un camión de comida.
El especial fue la hamburguesa Earthshot, desarrollada con tres productos que ganaron el Premio Earthshot 2022, un galardón creado por el príncipe de Gales para encontrar soluciones innovadoras a los mayores desafíos medioambientales del mundo.
Las hamburguesas vegetarianas se cocinaron en una estufa limpia Mukuru, que genera un 70% menos de contaminación que una estufa tradicional. Además, se sirvieron en cajas hechas de Notpla, una alternativa de plástico totalmente biodegradable hecha de algas y plantas.
Según la revista People, el postre preferido de la princesa de Gales es el pudín de toffee del pub The Old Boot Inn, en el condado de Berkshire.
El pub, y especialmente el pudín típicamente británico, ha sido durante mucho tiempo uno de los favoritos de Kate y su familia.
El jefe de cocina Rody Warot fue invitado a la boda de la pareja y dice que a Kate también le encanta el brioche tostado del pub, los higos asados con jamón de Parma y los linguini de gambas tigre y setas silvestres.
En una entrevista con la cadena radiofónica BBC Radio 1, el príncipe Guillermo y la princesa Catalina revelaron que su comida para llevar preferida suele ser un curry, aunque a la pareja también le cuesta decidir entre pizza o comida china.
Dicho esto, en la misma entrevista, el príncipe Guillermo también admitió que no puede soportar la comida picante.
A la princesa de Gales, le gustó comer ostras durante una visita a la Isla del Príncipe Eduardo en Canadá en 2011. El príncipe Guillermo también ha revelado en alguna ocasión que a ambos les encanta el sushi.
Esto va en contra del famoso rumor de que la realeza evita el marisco por si acaban con una intoxicación alimentaria. El chef Darren McGrady también desmintió el mito en Twitter, compartiendo un menú real que comenzaba con un soufflé de langosta.
Ahora que el duque y la duquesa de Sussex viven en Estados Unidos, el príncipe Enrique aprecia más que nunca una de las cadenas de hamburgueserías más populares del país, In-N-Out. De hecho, el personal ya conoce su pedido habitual.
En declaraciones a la revista Variety , Meghan reveló: “La favorita de mi marido es In-N-Out. Hay uno a medio camino entre Los Ángeles y nuestro barrio. Es muy divertido pasar por el drive-thru y sorprenderlos. Saben cuál es nuestro pedido”.
El pan de plátano es una forma estupenda de aprovechar los plátanos demasiado maduros. También resulta que es uno de los postres favoritos del príncipe Enrique.
En sus memorias, En la sombra, Enrique reveló que le gustan todo tipo de postres con plátano, como el pan de plátano y el flan de plátano.
El chef Darren McGrady aseguró a la revista People que a menudo preparaba platos clásicos británicos como el pastel de carne, las croquetas de pescado y el pudín de toffee para Guillermo y Enrique cuando eran pequeños.
En una ocasión, los príncipes querían cambiar de dieta y falsificaron una nota de su niñera diciendo que se les permitía pedir pizza para llevar. Por desgracia para ellos, su escritura infantil les delató.
La poutine, un plato básico canadiense, es uno de los platos favoritos de la duquesa de Sussex.
Meghan Markle descubrió el reconfortante plato de patatas fritas cubiertas con cuajada de queso y salsa caliente mientras rodaba la serie Suits en Toronto, según el portal Delish.com.
“Tiene que chirriar cuando lo muerdes... así es como sabes que está perfecto”, dijo a la publicación online.
A Meghan Markle le encanta cocinar. Antes de casarse con el príncipe Enrique, tenía su propio blog llamado The Tig, donde compartía consejos sobre comida y vino.
Su mejor consejo para preparar una pasta perfecta incluía hacer siempre la salsa antes de escaldar la pasta y guardar un poco del agua de cocción de la pasta para añadirla a la salsa, asegurando un resultado deliciosamente sedoso.
Meghan Markle también mostró recientemente sus habilidades culinarias en su serie de Netflix With Love, Meghan.
Su receta de espaguetis con ajo, tomates cherry, espaguetis y espinacas hechos en una sola sartén se volvió viral. Sin embargo, algunos se apresuraron a señalar su similitud con recetas de varios chefs conocidos.
Después de que el duque y la duquesa de Sussex anunciaran su compromiso en noviembre de 2017, el príncipe Enrique reveló en una entrevista con la BBC que le había pedido matrimonio mientras estaban “intentando asar un pollo”.
Meghan ya había asegurado anteriormente a la revista Good Housekeeping: “No hay nada tan delicioso (o tan impresionante) como un pollo asado a la perfección. Si tienes una receta de pollo asado al estilo de [la cocinera estadounidense] Ina Garten, habrá un antes y un después”.
Las fiestas en los jardines del Palacio de Buckingham son legendarias, con miles de asistentes y unas 27.000 tazas de té servidas en cada evento.
Junto con los delicados sándwiches y los bollos recién horneados, un clásico bizcocho Victoria es básico en el menú. El pastel lleva el nombre de la reina Victoria, de quien se dice que disfrutaba de una porción con su taza de té de la tarde.
La tarta real presenta un sencillo bizcocho con crema de mantequilla, un montón de gelatina de frambuesa o fresa y un poco de azúcar glas.
La ex chef real Carolyn Robb declaró al Daily Mail que muchos de los ingredientes de las comidas de la familia real británica procedían de los terrenos de las fincas reales. Por ejemplo, el salmón se pescaba en el río y las ciruelas procedían de los árboles de Highgrove.
En su libro The Royal Touch, Carolyn comparte gratos recuerdos de la búsqueda de setas silvestres con el rey Carlos en la finca de Balmoral, en Escocia.
El también chef Darren McGrady se hizo eco de lo dicho por Carolyn cuando declaró a la revista Marie Claire: “A la reina, le encanta comer cualquier alimento de la finca, como aves de caza, faisanes, urogallos y perdices”.
Los queridos corgis de la difunta reina también estaban bien alimentados. Incluso tenían su propio menú real, que rotaba entre ternera, pollo, cordero y conejo.
Darren McGrady dijo a la revista Hello!: “La Sra. Fennick, que cuidaba de todos los perros de Sandringham, lo elegía y nos lo enviaba a la cocina todos los meses”.
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Última actualización por Laura Ellis.